27.6.25

PRESENTACIÓN DE "LOS MUNDOS ANTERIORES" / FONDO DE CULTURA ECONÓMICA

Gracias a todos y todas por la presentación de anoche. Me sentí muy querido por Ani Shua, por Moi amor y por los amigos que vinieron. Besos, besos, besos.





26.6.25

OCTAVA REUNIÓN EXTRATERRESTRE DE LA CLÍNICA CIRUELA / GALPÓN TIME MACHINE












Hola. Hoy vamos a ir rápido porque tengo un montón de cosas que hacer. Pero les quería decir que adoré la reunión de anoche, con todo lo informal que fue. Largamos con las credenciales que hizo Pablo para el grupo, tomando ristretto de Cafezenda (el que compraba mi amigo el Sapo, fantasma que sigue los movimientos de la Clínica desde el más allá) con la torta de ciruelas Presidente que nos preparó la genia de Moira, y pasó por los siguientes estados hasta ser migas:















¡La comimos toda! Gracias, doctora.

Después completamos la conferencia “Experiencia y ficción”, de Shirley Jackson en la voz de Vicky, y leímos y analizamos el extraordinario (y engañoso) relato “Siete tipos de ambigüedad”, incluido en el libro “Cuentos escogidos”.

Al final leyeron Fabián y Mariano, dos cuentos excelentes. El de Fabián es casi perfecto. Para mi gusto solamente debería entrar más de lleno, le sobra toda la introducción y alguna frase suelta por ahí. Fabulosas las críticas que le hizo Pablo: fueron dos, una mejor que la otra. Cambiarle el título por uno metaliterario y concentrarte en la muerte como final potenciado. ¿Qué es la muerte sino eso? Acá se habla de una muerte infantil, a destiempo pero real, y una muerte de la ingenuidad del protagonista, también real y a destiempo, porque ya no es un niño.

Mariano sigue con la construcción de su libro a lo Rulfo, y su Comala cada vez pinta mejor. El cuento que escribió está más logrado que el anterior, que ya estaba más logrado que el anterior. Un climazo.

¿Por qué me estoy apurando tanto hoy? ¿Qué cosas tan urgentes tenés que preparar, Nil? Lo que ven en el afichito. Los espero dentro de un rato.


LOS ESPERO / PUNTUAL 18:30 EN LA LIBRERÍA DEL FONDO DE CULTURA ECONÓMICA


Vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan, vengan. 




24.6.25

PRESENTACIÓN DE "LOS MUNDOS ANTERIORES" DE GUSTAVO NIELSEN, CON SABOR ARMENIO / PABLO KENDIKIAN

El jueves 26 de junio a las 18:30 hs., en la Librería del Fondo de Cultura Económica (Costa Rica 4568), el escritor, dibujante y arquitecto Gustavo Nielsen presentará su última novela, Los mundos anteriores junto a Ana María Shua. Publicada simultáneamente en México y Colombia, esta ficción futurista transporta al lector al año 2053 y pone en jaque nuestra idea de la memoria, el amor y la vida misma.

En palabras de Nielsen, la historia arranca -y tiene un desenlace- en un sitio muy especial: el Restaurant Armenia de Palermo. “Buscaba un restaurante porteño con cualidades de personaje y, tras descartar otros locales, supe que el Armenia era el lugar indicado: un primer piso con barra acolchada, que no fashion, con comida extraordinaria y un fuerte compromiso comunitario”, explica el autor. De hecho, el propio código de wifi (“turquiaestadogenocida”) y el rol de resistencia cultural que ejerce el espacio convencieron a Nielsen de trasladar allí la acción de su máquina del tiempo cuántica.

En un futuro donde la enfermedad es destino inevitable, P, el protagonista, emprende un viaje sin retorno a 1919 -la única época en que el cáncer no existe- para salvar a Nane, la mujer que ama. Obligado a recurrir a una agencia de viajes temporales, descubre un mundo en el que las emociones están programadas y la memoria se conserva en “pañuelos digitales”. La novela plantea el dilema definitivo: dejar ir a Nane o desafiar las reglas de un presente que ya les fue ajeno.

La presentación de Los mundos anteriores incluye la lectura de fragmentos de la novela y la proyección de las diapositivas de los primeros croquis de la máquina cuántica, la vivienda y el auto del futuro diseñado por el propio Gustavo Nielsen y que se compartirá en su blog Milanesa con papas.

La cita es, entonces, en la hermosa librería de la calle Costa Rica, frente a plaza Inmigrantes de Armenia. La entrada es libre y gratuita y habrá brindis al final de la presentación.

20.6.25

EL ARCA ES NUESTRA PRISIÓN / FRAGMENTO DE “UN HOMBRE TRÁGICO”, CARLOS CHERNOV

 

“(…) Pasó mucho tiempo hasta que se retiraron las aguas y pudimos desembarcar. El envío de aves fue engorroso. El cuervo resultó un pájaro malévolo e insolente. Dios me desorientaba, tenía tanto poder sobre algunas de sus criaturas -había logrado que los leones comieran pasto en lugar de atacar a los bueyes- y no podía dominar al cuervo. Cuando le ordené que saliera del arca a inspeccionar el estado del mundo, el pajarraco se negó y me acusó de que lo mandaba a una misión peligrosa porque yo quería poseer a su hembra. Luego solté sucesivas palomas hasta que una trajo una ramita verde de olivo en el pico. Me extrañó que el diluvio no hubiera afectado a los árboles, habían sobrevivido un año bajo las aguas como si a ellos también los hubieran calafateado con brea. Supuse que la rama del olivo significaba que el suelo había comenzado a secarse. A los veintisiete días del segundo mes del año seiscientos uno de mi vida abandoné el arca.

Aunque me indignara que Dios hubiera transformado la tierra en un descomunal cementerio a cielo abierto, por las dudas, apenas desembarqué erigí un altar y le ofrecí un holocausto de animales puros. Al parecer, el suave olor de los animales sacrificados reconfortó a Dios, porque dijo que no volvería a exterminar a todo ser viviente. Me bendijo a mí y a mis hijos y nos dijo que procreáramos y nos multiplicáramos. Dibujó el arco iris en el cielo, y nos aseguró que cuando cubriera de nubes la tierra, el arco iris le recordaría su pacto con nosotros.

El pacto apaciguador me sonó como una especie de disculpa. Con su diluvio había matado a muchos amigos y familiares míos. Personas impías, pero queridas. Desgarrado por una tristeza que me ahogaba, reuní coraje y me atreví a criticarlo por tamaña devastación. Dios se quedó en silencio. Yo cerré los ojos esperando que también me matara.

- Es cierto -me dijo, por fin-, la matanza fue desmedida. En el futuro no recurriré a castigos tan indiscriminados, seré más preciso. Ya veo que confundiré las lenguas, y arrasaré a sangre y fuego ciudades pecaminosas. Pero para que los hombres entiendan -y en este momento alzó la voz y yo volví a cerrar los ojos temblando-, y no se desvíen del recto camino, cada tanto será preciso propinarles algún escarmiento.

(…) Todavía triste y enojado por tanta mortandad -también envalentonado por haber sobrevivido a mi primer reproche- me animé a enfrentarlo por segunda vez.

- ¿No querías desterrar el pecado? ¿El desorden sexual? ¿No se suponía que debíamos terminar con la fornicación? -lo increpé-. ¿Y el incesto? ¿Cómo vamos a repoblar el mundo con decencia si somos todos miembros de la misma familia?

Nuevamente cerré los ojos atemorizado; provocar la ira de Dios no es broma.

- Noé, lo que dices es cierto, pero es demasiado tarde, no tengo la solución para este problema -me respondió Dios con desconcertante humildad-. Harás lo siguiente: Plantarás una viña, harás vino, te embriagarás hasta desmayarte, sucederá lo que tenga que suceder y a la mañana siguiente te habrás olvidado de todo.”