" AS: Nosotros estamos justo estudiando teoría de la novela, y estudiamos a Bajtín y a Lukács. Y vos sos un escritor que escribe novelas pero también otros géneros: sos poeta, cuentista. Nosotros lo vemos desde la perspectiva de la teoría, pero ¿cómo ves vos desde la práctica la diferencia entre géneros?
F: Yo te digo mi experiencia, que no es la práctica. Lo mío es muy simple y lo dije muchas veces. El cuento se escribe al dictado. No hay un solo cuento que no haya escrito al dictado. Yo con el cuento escucho una voz. Esto es así. Después vemos qué será. Me pongo en una posición psicofísica o algo, y aparece un tipo que no soy yo, y habla. Habla. A veces siento que es la voz de Hebe Uhart. Soy maricón pero no me identifico ni con Dietrich ni con Callas ni con Hayworth. Es la voz de Hebe Uhart. La filtro con Silvina Ocampo, y con Victoria -a Victoria nunca le sentí la voz, a Silvina sí. Y aparece la voz, entonces, y sale el cuento. Al dictado. A diferencia de eso, la novela se construye. Es casi redactada. A pesar de que, si la novela es buena, da lugar para que, si uno en ese momento está con la vena poética, saque la voz ésa. O cualquier otra cosa, y que eso pueda caber en la novela. Pero la novela es construcción. Lógico-matemática. En Vivir afuera, por ejemplo, cada párrafo está determinado por su contraste métrico con el párrafo anterior. Mi pelea con Sudamericana fue porque yo había diagramado el libro para un tamaño que ellos me habían dicho que le iban a dar al libro, y después, para ahorrar no sé cuántas páginas, le cambiaron el formato, y todos los saltos de página cayeron donde no tenían que caer. La diferencia es ésa: la novela se construye. No sé qué puede pasar con una novela 100% construida; seguramente, si yo lo hiciera y estuviera tan bien construida, quizás el lector deploraría algo. "Tomás Eloy Martínez ha perdido su vena lírica", dirían. Eso en cuanto a la relación cuento/novela. Nada que ver con la poesía, porque en la poesía no hay ningún interés en comunicar. Para mí. El poema se escribe siguiendo una música, y la gracia está en ver si uno acertó con la música adecuada para lo que está poniendo. Eso lo logran los poetas músicos, o también los músicos poetas -que hay cada vez menos, queda Caetano Veloso y no sé quién más."
No hay comentarios.:
Publicar un comentario