El Festival Azabache estuvo genial. Es el único festi de literatura, junto al de Mempo en el Chaco, en el que no te dormís. Se escuchan conferencias y mesas redondas, pero también se juega todo el tiempo. Pude dibujar, bailar, comer, pasear; conocí gente, jugué al paint-boll (todavía me duele el cuerpo de cuando ganamos una trinchera); actué en pelis, fui a la playa, leí, hasta canté un tango con el Gran Landi.
Carlos Balmaceda, Fernando del Río y Javi Chiabrando SE PASAN de copados.
Un abrazo para todos los amigos que estuvieron ahí.
Acá la nota de Gabi Cabezón Cámara.